Ya ha empezado el curso escolar. Ya empiezan los despertadores, desayunos con dibujos, no te manches el uniforme, coge el almuerzo y la mochila y vamos que llegamos tarde. Ya ha pasado la semana de adaptación (con mi #littleprincess hemos necesitado dos semanas) y ya te dice adiós cuando entra a la guarde tan contenta. Y tú te vas a casa con una sensación extraña de felicidad y nostalgia. Felicidad porque los ves contentos irse al cole y nostalgia de que se hacen mayores y parece que no te echan tanto de menos. Pero compensa el verles salir corriendo para darte un abrazo y que les cojas su mochila. ¿Quieres ver lo que hay la mochila de L? Ahora te lo enseño.
Este año no lleva libros ni nada parecido. Sólo lleva una muda de ropa limpia y su almuerzo. Pero no podía meterle la ropa ahí sin más en la mochila así que le preparé esta pequeña bolsa de saco para poder llevar toda su ropa limpia bien guardada.
Como ves es una tela muy divertida y tiene un toque tipo kawaii japonés. A mi me recuerda un poco al conejito miffy y por eso me encantó para que fuera la mochila de L. Tiene varios animalitos más, flores y nubes.
Su interior es rojo, para que haga contraste. El cordón que sirve de cierre en azul cielo. ¿Y los lunares? Pues los puedes ver en una cinta en el lateral de la bolsa a modo de detalle. El cierre del cordón finalmente no lo he dejado con un nudo, sino como en la foto de instagram, con corazones azul sea de fieltro.
¡Hasta pronto!
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